el telescopio miope qu’a prisió una fotografía las estrellas

El 24 de abril de 1990durante exactamente 33 años, la humanidad invirtió más de 10 millones de dólares lanzar un telescopio espacial de última generación que, mira tú por dónde, resultó ser profundamente miope. Así empezó la historia del Hubble, uno de los instrumentos científicos más importantes revelados en las últimas décadas y una de las herramientas que, según los expertos, ha transformado radicalmente nuestra comprensión del universo. Trans más de treinta años de recorridoya hora que empiezan a correr rumores sobrio su posible júbilovale la pena recordar como empezó el viaje espacial de Hubble y cómo un telescopio ‘cegato’ acabó captando algunas de las imágenes más espectaculares de nuestro cosmos. Su historia empieza tal que así.

Hubble ha lanzado una bonita mañana de primavera desde el centro espacial Kennedy de Florida (Estados Unidos). El telescopio es puesto en órbita a una altitud de 540 kilómetros. Muy poco después del uso de este instrumento científico, uno de los más caros de construidos hasta ese momento, el equipo de la misión descubrió algo espantoso. Las primeras imágenes enviadas por el Hubble estaban borrosas y no cumplian ni de lejos con lo que se esperaba de un aparato así. La comunidad científica internacional demostró con espanto aquellas fotografías espaciales es que, contra todo pronóstico, eran de una calidad espantosa y no servían para las investigaciones científicas que se habían plantado.

Un defecto de fabricación de tan solo un milímetro puso en mi vista el telescopio

Tras un exhaustivo análisis de la situación, el equipo técnico de la misión preparó dar con un diagnóstico. Hubble sabía de un defecto de fabricación grave. ¿El culpable? An error al pulir uno de los espejos principales del telescopio que había provocado un defecto de apenas un milímetro. Este detalle, que ‘a priori’ podía parecer insignificante, había puesto totalmente en chaqueta la visión del Hubble. Los expertos explican que esta ‘aberración óptica’ provoca un nivel de distorsión que hace que el telescopio intente captar la luz de una estrella acababa de crear una imagen donde la luz se parramaba por alla laente. En la práctica, era como si sufriera de miopía porque lo veía todo borracho y no era capaz de enfocar correctamente los objetos distantes.

Unas gafas para Hubble

La noticia de que Hubble era miope saltó a la luz en agosto de 1990, tan solo cuatro meses después del lanzamiento de la misión. La buena noticia, según anunciaron los investigadores que habían ultimado el diagnóstico, es que ya estaba claro cuál era el problema que afectaba al telescopio. Solo faltaba encontrar una solución. Entonces empezó una verdadera odisea científica en la que los expertos de todo el mundo se pusieron manos a la obra para intentar curar la miopía de Hubble. Los trabajos fueron liderados por la NASA y por la Agencia Espacial Europea (ESA), los dos impulsores de este proyecto, pero también contó con el asesoramiento de expertos independientes todo el mundo.

¿Que harian ustedes si quisieran ayudar a una persona con miopía un mejor gusano? ¿Las pondrían gafas, verdad? Pues eso se hizo con el Hubble. El equipo científico de la misión ha desarrollado una serie de correctores ópticos para que el telescopio pueda mejorar su visión. Allá creación y desarrollo de las ‘primeras gafas’ del Hubble tardó casi tres años. La idea será armar un conjunto de especias y lento capaz de «compensar» la distorsión que padecía este telescopio espacial. The main slow of this gigantesco aparato tenía casi dos metros y medio de diámetro así que no se podía cambiar. El objetivo era conseguir la manera de superponerle una especie de ‘gafas’ para curar su miopía.

Un dúo de astronautas realizó una operación de casi siete horas para colocarle las ‘gafas’

fr diciembre de 1993, más de tres años después de su lanzamiento, un equipo de astronautas viajó al espacio para ponerle gafas al Hubble. La misión, conocida como STS-61, fue liderada por Jeffrey Hoffman y Story Musgrave (este último, por cierto, además de astronauta, también era médico). La operación duró 47 minutos. Durante este tiempo, Hoffman y Musgrave instalaron un juego de espejos correctores del diametro de una moneda. Un mes después, el 13 de enero de 1994, Hubble envió la primera imagen captada con sus nuevas gafas. Y ahí sí que se vio que, por fin, era capaz de capturar las estrellas con una claridad y un detalle sin precedentes.

espacio mirado

Tras un inicio un tanto caótico, el telescopio espacial Hubble ha dedicado los últimos treinta años de su vida al estudio del universo. Su mirada ha logrado revelar secretos hasta ahora uneditos de nuestro cosmos. Fue él quien, de sus observaciones, perforó calcular la edad de nuestro universo (que se ubicó en un año 13,8 mil millones de años); descubrir la existencia de tanto de la materia oscura como de los agujeros negros; traer pruebas sobrias a la expansión del universo; observar la formación y evolución de millas de galaxias lejanas; y descubre exoplanetas en los que, quién sabe, podría haber alguna forma de vida como la nuestra.

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Hubble también es responsable de las algas imágenes más icónicas que tenemos sobre nuestro universo. ¿Recuerdan la espectacular fotografía conocida como ‘los pilares de la creación’ en la que siete tres columnas de polvo y gas interestelar rodeado de estrellas? apesta capturado por Hubble el 1 de abril de 1995. ¿Y esa imagen conocida como ‘el ojo de dios’ (o ‘el ojo de Sauron’) en el que se ve una espectacular nebulosa llena de colores? También obra de este telescopio espacial, que la capturo allá por 2003. La carrera de este telescopio espacial ha sido tan prolífica que la propia NASA ha creado un repository en el que puedes consultar qué imagen captó el Hubble el día de tu cumpleaños.

La misión de este prodigio espacial debió durar unos años pero, gracias a numerosas ‘operaciones’ y maniobras técnicas, Hubble ha podido duplicar su esperanza de vida. En estos momentos, el telescopio sigue activo y en plena forma. Eso sí, es posible que en los próximos años se jubilee definitivamente. Sobre todo después del lanzamiento del James Webb, un instrumento hachís con más potencia que el Hubble. Solo el tiempo dirá cómo acaba la historia de este miopía espacial que aprendió a fotografiar las estrellas.