Calviño: “España tiene un papel clave que jugar como puerta entre la UE y América Latina” | Economía
La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha destacado este miércoles el rol de España para potenciar las relaciones entre la Unión Europea y América Latina, que ha definido de estratégicas. “España tiene un papel clave que jugar como puerta entre estos dos continentes”, ha recalcado en un acto celebrado en la Casa de América de Madrid. El evento, organizado por CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, ha servido para analizar algunos de los retos comunes en tres grandes áreas: transición verde, transformación digital y desarrollo humano.
A solo un par de días de la reunión informal que mantendrán por primera vez ministros de Economía y Finanzas de la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en Santiago de Compostela, Calviño ha llamado a reforzar lazos en un entorno especialmente turbulento. “En estos años lo hemos visto todo: la pandemia, una guerra a las puertas de Europa, ahora estamos viendo esas catástrofes naturales que nos sobrecogen a todos a lo largo de todo nuestro mundo y en este contexto de retos globales de tensiones geopolíticas, de fragmentación comercial, creo que el compromiso con el multilateralismo y con la cooperación es particularmente importante”, ha señalado.
El presidente de CAF, Sergio Díaz-Granados, impulsor de ese encuentro de ministros de ambos bloques, confía en que “será la oportunidad de marcar una fecha prometedora para la historia”. Y pidió resultados concretos aprovechando el anuncio que el pasado julio realizó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, de que se pondrán a disposición de la región 45.000 millones de euros en planes de financiación a través de la herramienta Global Gateway.
En la misma línea se expresó Calviño, que afirmó que, a diferencia de otros encuentros donde priman más los buenos deseos “y el blablablá”, en este, organizado en el marco de la presidencia española del Consejo de la UE, hay sustancia y una lista de proyectos estratégicos a los que se dará seguimiento. La ministra de Economía hizo un repaso de las cifras que suman ambas regiones, que han visto incrementarse su comercio un 40% en 10 años, y juntas comprenden 60 países que representan el 14% de la población mundial y el 21% del PIB global.
Una de las ideas más repetidas por los ponentes fue la de que América Latina tiene mucho que aportar. “Por muchos años ha sido vista como una región fuente de problemas en el mundo, pero también es importante llevar el mensaje de que tiene muchas de las soluciones para los problemas del mundo, en particular en la transición energética que va a ser intensiva en bienes que produce América Latina”, resaltó Álex Contreras, ministro de Economía y Finanzas de Perú y presidente del directorio de CAF.
Aunque la región es rica en metales necesarios para la fabricación de baterías de los coches eléctricos como el cobalto, el níquel y el litio, la ambición va más allá de ser un mero suministrador de materias primas, como explicó en uno de los paneles Mauricio Cárdenas, profesor en Liderazgo Global en la Facultad de Asuntos Internacionales y Públicos de la Universidad de Columbia y exministro de Hacienda de Colombia. “No queremos repetir el ciclo de ser el proveedor de materias primas y tener un nuevo proceso de desindustrialización, No hay que repetir la experiencia de vender productos bajo valor agregado. Los acuerdos tienen que ser sobre la base de crear valor agregado y que se inserte a América Latina en las cadenas valor de la producción del coche eléctrico”.
Más expuesta al cambio climático
Cárdenas recordó que la región está particularmente expuesta a los efectos del cambio climático, porque su temperatura media es mayor a la europea, lo que aumenta el riesgo de desastres naturales, y porque su capacidad de adaptación es menor, debido, en parte, a que su acceso a la financiación conlleva el pago de más intereses, ya que son percibidos como de más riesgo pese a que sus países están de media menos endeudados que los europeos. Y esos altos intereses complican que salgan adelante proyectos para hacer frente al cambio climático.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, advirtió en su intervención de las consecuencias económicas del cambio climático. ¿Alguien piensa que las inundaciones de Grecia o Libia no tienen impacto en la población y los sectores productivos? ¿Alguien piensa que el impacto es igual para todos los ciudadanos? ¿Alguien piensa que 32 grados en Buenos Aires en invierno es algo normal? ?¿O que sequías prolongadas pueden convivir con la seguridad alimentaria?”
El hidrógeno verde como nueva fuente de suministro, el gas natural licuado como energía de transición o los esfuerzos conjuntos para reducir la deforestación fueron algunos de los temas que planearon las mesas redondas. En ellas se habló de casos de éxito como el de la región argentina de Misiones, que cuenta con bosques nativos en más de la mitad de su territorio, o de Uruguay, por boca de su ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche. “Un porcentaje muy importante de la energía eléctrica, el 93%, proviene de energías renovables. Y si miramos la eólica estamos en una situación similar a Portugal, Dinamarca o Irlanda”, señaló.
Colombia quiere subirse a esa ola, El ministro de Hacienda y Crédito Público, Ricardo Bonilla, apuntó al potencial eólico y solar de su país en algunas zonas desérticas. Y dijo que necesitan reindustrializarse reemplazando las instalaciones de dedicadas a ensamblar vehículos de motor de combustión por las eléctricas.
Juventud y crecimiento tecnológico
Enrique Riquelme, consejero delegado del grupo Cox Energy, muy presente en América Latina, sostiene que entre los atractivos de la región está su juventud, con una edad media que no llega a los 30 años, y su creciente demanda de energía. Gustavo Beliz, exsecretario de Asuntos Estratégicos de Argentina, suma a esos factores el crecimiento de los unicornios —startups que superan los 1.000 millones de valoración—. Han pasado de ser cinco en 2018 a 34 en 2022. Y entre las carencias cita que América Latina necesita formar a 700.000 personas expertas en ciberseguridad y bioseguridad, así como crecer en sectores de alta tecnología como el de los semiconductores o la computación cuántica.
Para la secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial del Gobierno español, Carme Artigas, “la digitalización es una gran herramienta de vertebración regional y debe ser un dique de contención de la desigualdad”. Una idea que entronca con otra expresada por Max Trejo, secretario general del Organismo Internacional de la Juventud, para quien los jóvenes latinoamericanos “tienen que transitar de ser consumidores a productores de tecnología”, para lo que es necesario una mayor formación en competencias digitales.
Trinidad Jiménez, directora de Estrategia Global de Asuntos Públicos de Telefónica, alabó las infraestructuras digitales de América Latina, pero recordó que aún hay que seguir desplegando nuevas instalaciones, y eso se traducirá en inversiones multimillonarias. “Entre 2023 y 2030 va a necesitar más de 100.000 millones de dólares para desplegar infraestructuras digitales”. Por lo que reclamó un marco regulatorio adecuado para los inversores y estrechar la colaboración público-privada.
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