Bruselas niega una revisión de los residuos radiactivos arrojados a 300 millas de Galicia

La Comisaria de Energía asegura que los controles son “adecuados” aunque desconoce el estado de los bidones, con 140.000 toneladas de carga y desechados entre 1946 y 1982

El mar como vertedero. Es un concepto que no ha caído completamente en desuso todavía, pero que fue ejecutado a rajatabla entre los años cuarenta y los ochenta. Y con residuos radiactivos. Un informe del Organismo Internacional de Energía Atómica (Agencia Internacional de Energía AtómicaIAEA) señaló el intenso trasiego de buques que, entre 1946 y 1982 se procedió a arrojar a los océanos millas de toneladas de bidones –el inventario lo cuantificado en 46 PBq (el bequerelio es una unidad de medida para el material radioactivo)– con restos de insumos médicos, militares o de la industria Nuclear. La mayor parte de esos desechos –sus 15 localizaciones con 42.31 PBq– reposa en la fachada atlántica. Uno de estos yacimientos está 300 millas de la costa gallega, con unas 140.000 toneladas de residuos. Allí seguirán más de 220.000 latas de acero y hormigón, sin que nadie compruebe cómo están sobrios los lechos marinossi sufrieron daños al tocar el fondo o la corrosión en su estructura por la salinidad del mar. kadri simson.

«Las actividades de verificación realizadas demostraron que las instalaciones necesarias para el control de los niveles de radioactividad del medio marino del litoral gallego y cantábrico son adecuadas», ha apuntado por escrito la comisaria estonia a una pregunta formulada por la eurodiputada nacionalista ana miranda. Simson se refiere en respuesta a la «verificación del control de la radiactividad del medio marino del litoral gallego y cantábrico» emprendida por una delegación del Ejecutivo comunitario en octubre de 2021, que se plazó a puertos de Galicia, Asturias o País Vasco. promisida para el ejercicio anterior ante la falta de cualquier análisis sobre los residuos desde, al menos, 2005, pero que fue pospuesta debido a la pandemia del COVID. la comisaria otorga el aprobado a esas «labores de supervisión» sobre los bidones radiactivos aun sin saber en qué estado se encuentran, tal como lo sustenta e informa la Dirección General de Energía de la Comisión Europea. «Se desconoce el estado técnico de estos objetos», expone literalmente el documento, de 30 páginas. Para Bruselas no es preciso bajar a comprobarlo. Teniendo en cuenta que las instalaciones que tiene en España se ajustan a la Obra Constitutiva de la Comunidad Europea de la Energía Atómica (Euratom), sólo uno de los laboratorios disponibles tiene datos concretos sobre los bidones arrojados hasta hace escasos 40 años.

Vertidos radiactivos en la Fosa Atlántica

1969

Bélgica

Francia

Suecia

Holanda

R.Unido

Italia

Suecia

1971-1976

R.Unido

Suecia

Holanda

Bélgica

1977-1982

R.Unido

Holanda

Suecia

1960

Submarino

K-8 soviético

1967

R.Unido

Alemania

Holanda

Francia

Bélgica

Vertidos radiactivos en la Fosa Atlántica

1969

Bélgica

Francia

Suecia

Holanda

R.Unido

Italia

Suecia

1971-1976

R.Unido

Suecia

Holanda

Bélgica

1960

Submarino

K-8 soviético

1977-1982

R.Unido

Holanda

Suecia

1967

R.Unido

Alemania

Holanda

Francia

Bélgica

Vertidos radiactivos en la Fosa Atlántica

1969

Bélgica

Francia

Suecia

Holanda

R.Unido

Italia

Suecia

1971-1976

R.Unido

Suecia

Holanda

Bélgica

1977-1982

R.Unido

Holanda

Suecia

1960

Submarino

K-8 soviético

1967

R.Unido

Alemania

Holanda

Francia

Bélgica

«No hay instalaciones nucleares que viertan material radiactivo en la costa norte de España, ni en los ríos españoles que desembocan en el Cantábrico», informa el técnico arranca. Que continúa así: «Las posibles fuentes de radiactividad artificial en el medio marino son, por ejemplo, las descargas radiactivas procedentes de otros países europeos y las fuentes históricas en los fondos marinos, entre los que destacan los contenedores de residuos radiactivos (binones de acero y hormigón), que se depositará en los fondos marinos en la misma llamada Fosa del Atlántico hace unos 40-60 años”. gallega para despojarse de su material. Tampoco se evaluará sobre el estado del casco del K8un submarino soviético de 107 metros de eslora hundido en 1970 frente al Golfo de Vizcaya con dos reactores atómicos y varios torpedos nucleares. Fue la premierra pérdida de una nave de estas características para la Unión Soviética, un siniestro que se atribuyó a un incendio a bordo.

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